Madeline Deveridge conoce muy bien los rumores según los cuales ella ha enviado a su esposo al otro mundo y ocultado las huellas de su crimen. Pero Madeline tiene un problema más acuciante que el de ser conocida con el mote de "Viuda Siniestra", ya que vive acosada por el que parece ser el fantasma de su difunto esposo. Desde luego, esto es imposible, pero Madeline no puede correr ningún riesgo. De manera que acude a la única persona capaz de desvelar la verdad: Artemis Hunt.
Brillante, implacable y solitario, Artemis se ha ocupado muy bien de mantener oculta la mayor parte de su vida privada. Una noche neblinosa de Londres, la curiosidad lo impulsa a encontrarse con la Viuda Siniestra, pero muy pronto su diversión se desvanece al comprobar que Madeline sabe lo suficiente de su intimidad como para causar estragos en su ordenada existencia. Debe asegurarse de que ella jamás divulgará sus secretos, aunque eso implique ayudarla a perseguir a un fantasma. Tan pronto como sellan su acuerdo, nace entre ellos una pasión arrebatadora... y además descubren que el fantasma representa un peligro muy real.
Tengo que decir que había puesto demasiadas expectativas en este libro, y es que el anterior (aquí) de la misma autora me había gustado tanto... Me ha gustado, pero la sensación no ha sido la misma. Como el anterior todo pasa rápido, sin grandes dramas ni desgracias insoportables. Lo considero lectura muy ligera, para poder conciliar el sueño sin pensar ¿qué pasará ahora?.
Hasta la próxima...!*
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